Cuidados tras una cirugía de columna: ¿qué hacer?

Después de una cirugía de columna, ya sea por una hernia discal lumbar o cervical, una microdiscectomía lumbar o una artrodesis, el cuerpo necesita un periodo de adaptación y cura. La recuperación suele ser progresiva, pero con unos cuidados básicos es posible volver poco a poco a la rutina sin molestias innecesarias ni riesgos.

Cuidados tras una cirugía de columna

Cada intervención es distinta, pero la mayoría de pacientes comparten unas recomendaciones esenciales. Estos cuidados ayudan a proteger la zona operada, mejorar la movilidad y evitar complicaciones durante las primeras semanas.

Cuidado de la herida y protección de la zona operada

La herida debe mantenerse limpia y bien protegida. Durante los primeros días no debe mojarse directamente y las duchas deben hacerse con precaución. Cuando el especialista autorice mojarla, lo habitual es secarla con suavidad, sin frotar.

Observar la zona cada día ayuda a detectar cualquier cambio. Un aumento del enrojecimiento, inflamación, calor o secreción puede indicar que algo no va bien y conviene comunicarlo cuanto antes. Una buena cicatrización es clave para todas las cirugías de columna, especialmente en intervenciones mayores como una artrodesis.

Movimiento suave y caminatas diarias

Tras las cirugías por hernia discal o meniscectomía lumbar, caminar desde el principio suele ser una parte importante de la recuperación. Los paseos deben ser cortos al principio y ampliarse poco a poco, siempre sin forzar. Mantenerse completamente inmóvil no ayuda, ya que aumenta la rigidez y el dolor.

También conviene evitar permanecer mucho tiempo sentado o de pie; cambiar de postura con frecuencia alivia la tensión en la zona intervenida. En el caso de una artrodesis, la movilidad puede avanzar más despacio, pero el principio es el mismo: movimiento suave, continuo y progresivo.

Evitar esfuerzos y movimientos que puedan dañar la columna

Las primeras semanas son delicadas. No se deben levantar objetos pesados ni realizar movimientos bruscos, especialmente giros o flexiones profundas del tronco. Al agacharse, lo adecuado es doblar las rodillas en lugar de inclinar la espalda.

Las tareas domésticas como barrer, empujar muebles o cargar bolsas pueden generar molestias y retrasar la recuperación. Además, los deportes de impacto, correr o el gimnasio deben esperar hasta que el médico lo autorice.

Control del dolor y descanso adecuado

Es normal sentir molestias después de este tipo de cirugía, especialmente los primeros días. Por ello, es recomendable:

• Tomar el tratamiento tal como se ha indicado
• Alternar el descanso con paseos cortos
• Dormir boca arriba con una almohada bajo las rodillas o de lado con un cojín entre las piernas
• Mantener una buena hidratación y una alimentación equilibrada

Fisioterapia y fortalecimiento progresivo

La fisioterapia suele comenzar semanas después de la cirugía, cuando la herida ya está mejor. Los ejercicios se centran primero en recuperar la movilidad y reducir la rigidez.

Más adelante se trabaja el fortalecimiento del abdomen, la zona lumbar y el cuello, especialmente tras una hernia cervical, para dar estabilidad a la columna. En una artrodesis, el proceso es más lento, pero el objetivo es el mismo: recuperar la fuerza, la movilidad y una buena postura.

Preguntas frecuentes tras una cirugía de columna

Tras una cirugía de columna, pueden surgir las siguientes preguntas:

• ¿Cuándo se puede volver a hacer deporte?: En la mayoría de cirugías de columna, el ejercicio suave puede iniciarse entre las 4 y 6 semanas, siempre con la autorización del especialista. Actividades como correr, saltar, gimnasio o deportes de impacto suelen retomarse a partir de los 3 meses, y en casos como la artrodesis, los deportes intensos suelen esperar hasta los 6 meses.
• ¿Cuándo se puede conducir?: Lo habitual es evitar conducir durante las primeras 2 semanas. A partir de la semana 3 o 4, la mayoría de pacientes pueden conducir trayectos cortos si no sienten dolor al girar el tronco o al frenar. Para viajes largos, se recomienda esperar 6 semanas y hacer pausas cada 45–60 minutos.
• ¿Cuánto tiempo tarda en poder volver al trabajo?: En trabajos de oficina o tareas sedentarias, suele poder retomarse la actividad entre las 2 y 4 semanas. En empleos que requieren esfuerzo físico, cargar peso o movimientos repetitivos, lo normal es volver entre las 8 y 12 semanas, dependiendo de la intervención.
• ¿Cuándo puedo volver a dormir boca abajo?: Dormir boca abajo no se recomienda hasta pasadas 6 semanas, ya que esa postura aumenta la presión sobre la columna. Lo más adecuado es dormir boca arriba o de lado durante el primer mes y medio, y después cambiar de postura solo si no genera molestias.
• ¿Cuándo se puede viajar en coche o avión?: En coche, como pasajero, pueden hacerse trayectos cortos desde la primera semana, con paradas frecuentes. En avión, lo habitual es esperar 3 semanas para vuelos nacionales y 6 semanas para vuelos largos, debido al tiempo prolongado sentado.
• ¿Es normal sentir hormigueo en piernas o brazos?: Pequeñas sensaciones de hormigueo, pinchazos o ardor pueden aparecer durante las primeras 4–6 semanas, sobre todo en cirugías por hernia discal o cervical. Si el hormigueo aumenta o se acompaña de debilidad, conviene comunicarlo al especialista.

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